Se firmemente que la conciencia atesora todo el conocimiento que hemos adquirido a través de nuestra experiencia singular, que tiene por tanto una sabiduría que comunica a través de un lenguaje sensible: fenómenos que nos ocurren a menudo y en los que debemos confiar y saber hacer la lectura correcta de ellos. Las intuiciones, las visiones, las películas mentales son algunos de los fenómenos más comunes a los que nos enfrentamos con la incertidumbre propia que nos provoca nuestra parte menos lógica y racional. Me preguntaba un amigo que cómo podía distinguir una intuición de un miedo ya que la intuición nos puede anticipar un acontecimiento que tememos que ocurra. Las intuiciones nos anticipan esos acontecimientos para que nos preparemos y maduremos en nuestros miedos y emociones. Cuando el acontecimiento sucede, comprobamos que se trataba de una intuición; pero si no sucede, es el miedo el que nos está trayendo eso que parecía ser una intuición y solo era el temor de que algo sucediera. El miedo hay que trabajarlo para despejarle el camino a la conciencia. Pero no es solo el miedo el que interfiere en las intuiciones, otros factores como la vanidad, la manipulación, el mal uso del poder, pueden confundir a las personas que creen manejar sus intuiciones al cien por cien.
En definitiva, lo que hay que mantener para que las intuiciones no nos engañen es una gran pureza, cosa que solo se consigue cuando vamos depurando y cerrando las fisuras, haciendo un trabajo personal de revisión constante. El miedo podemos despejarlo, pero la vanidad, la manipulación y el mal uso del poder son perversiones mayores con las que la conciencia se verá cara a cara en algún momento, dada las consecuencias que provocan en el entorno, las cuales revertirán en la propia vida del perverso. Sólo quiero apuntar este detalle, pero sabiendo que la mayoría somos gente de bien, quiero animar a confiar en los pálpitos del corazón, aunque nos acerquen cosas que no deseamos. Como he dicho antes, ocurren para que nos preparemos y maduremos en nuestros miedos y emociones.
